Con toda la controversia que rodea a los suplementos dietéticos, puede ser difícil separar los hechos de las exageraciones. A veces, una cosa en particular será muy popular durante un par de meses y luego desaparecerá de la conciencia pública. Otras veces, los suplementos que pensamos que son seguros resultan ser cualquier cosa menos eso.
Sin embargo, sí sabemos que una dieta rica en nutrientes y antioxidantes críticos contribuye en gran medida a reducir el riesgo de desarrollar cualquiera de las tres principales enfermedades relacionadas con la dieta: cáncer, diabetes y enfermedades del corazón. Por supuesto, hay más en el riesgo general que solo la dieta, pero lo que comemos es una de las pocas cosas que podemos controlar cuando se trata de la salud.
Los suplementos pueden hacer que sea más fácil obtener suficiente nutrición en tu dieta diaria. Una gran opción, llena de nutrientes y antioxidantes, es la espirulina. Tiene una popularidad probada por el tiempo y los usuarios han descubierto que la espirulina constantemente hace maravillas para el cuerpo. Pero como todo, hay riesgos involucrados, y la espirulina no se recomienda para todos. Permanezca con nosotros mientras nos sumergimos en las maravillas y las advertencias sobre los suplementos de espirulina.
1. Protección contra la enfermedad
Los antioxidantes protegen tus células y tu ADN del daño oxidativo causado por los radicales libres. El daño oxidativo, a su vez, causa inflamación crónica y crea un ambiente propicio para la propagación de la enfermedad. La espirulina tiene muchos antioxidantes para unirse a los radicales libres y neutralizarlos antes de que puedan causar esa inflamación crónica.
El principal antioxidante activo en la espirulina se llama ficocianina. Este antioxidante es también lo que le da a la espirulina su único color azul verdoso. Más allá de combatir los radicales libres, se ha demostrado que la ficocianina inhibe la producción de ciertas moléculas que indican al cuerpo que provoca una inflamación.
